Nuestra familia siempre ha sido muy hospitalaria. Cuando nuestros padres se trasladaron de Madrid a Altea, cumplieron su sueño construyendo una finca en una zona muy tranquila en mitad de un pinar con las montañas de Bernia de fondo. El contacto con la naturaleza era su pasión, por ello, fueron plantando con la máxima ilusión las palmeras, olivos y naranjos, que hoy se han convertido en un vergel donde nuestros huéspedes pueden disfrutar de una escapada en plena naturaleza huyendo de las grandes ciudades y el estrés diario.
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El espíritu de nuestra familia es la hospitalidad, ¡nos encanta recibir y compartir! Por eso, nos gustaría que nuestros invitados puedan disfrutar del clima suave y soleado durante todo el año de la Costa Blanca. Esta magnífica zona del Mediterráneo atrae tanto a aquellos que aman el sol como a los practicantes de deportes como el tenis, el golf, el ciclismo, senderistas....todo ello incluyendo una exquisita y cuidada gastronomía.
Con el tiempo añadimos la propiedad vecina con el fin de ampliar nuestra capacidad. Ambas fincas han sido preparadas y modernizadas con mucho cariño e ilusión para procurar el máximo disfrute de nuestros huéspedes.
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Bienvenidos a Las Araucarias y Los Azahares
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La familia Lüchinger te da la bienvenida.